Reforma del emblemático Bar Guridi de Eibar. Deseo constante de relacionarse con el exterior aprovechando el juego que permite la carpintería de fachada, con la posibilidad de disponer de un espacio recogido o de eliminar los límites del local, convirtiéndose en una extensión de la calle, en todo caso, ofreciendo una invitación amable difícilmente rechazable.
Como elemento central del bar y monumento a la CERVEZA, encontramos el cañero de acero inoxidable que sirve su contenido del depósito revestido de cobre bruñido.
Materiales, colores y formas hacen referencia a su otra gran pasión, el RUGBY.
Buenos partidos y mejor cerveza.